Nos creemos el ombligo del mundo, que podemos con todo, que somos independientes y que no necesitamos a nadie, simplemente a nosotros mismos, pero llega un momento en el que conoces a una persona de la que parece que siempre dependerás, la que necesitas para comerte el mundo porque sin ella no eres nadie.
Aquí os dejo algunas de las últimas fotos que he hecho:)
preciosa, increible texto por cierto:)
ResponderEliminarque bonito! ya sabes que a mi estas cosas no se me ocurren, pero tu te llebas la palma. Me encantan tus entradas =)
ResponderEliminarmuchas gracias! nos alegramos de que te guste:D
ResponderEliminarTodos somos más dependientes de lo que creemos (o queremos creer).
ResponderEliminarUn precioso blog :)
aunque ser independiente nunca está del todo mal:)
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